Ya hemos hablado en muchas ocasiones de los beneficios de las láminas solares en cuanto a la seguridad que supone frente a la rotura de cristales. Pero en este post, veremos que estas láminas son perfectas en otras situaciones menos conocidas:
Antigraffiti
Aunque no son iguales que las solares, estos productos están más enfocados a los actos vandálicos, muy especialmente cuando se habla de pintadas.
En esta ocasión, las láminas se colocan por la parte exterior. No importa si se vierten ácidos, se hacen rayones o un pequeño graffiti: el escaparate quedará completamente protegido.
Antirrobo
Estos adhesivos aumentan la resistencia del cristal ante cualquier tipo de acto vandálico. De la misma forma, en caso de impacto premeditado o fortuito, también hace posible la fijación de todos los fragmentos en la lámina, lo que evita su proyección. Seguridad y prevención van de la mano.
En este último caso, son muy recomendables en colegios y guarderías, donde un pequeño incidente con un fragmento punzante puede provocar graves daños.
Lo más importante es elegir el grosor más adecuado al espacio en el que se procederán a colocar.