Que un coche pase pocas veces por el taller consuela a los conductores. Pero aunque no visite mucho el taller, alguna vez tiene que hacerle una visita. Para conseguir la confianza de sus clientes, los talleres deben cumplir con la legalidad y los usuarios con unas pautas básicas.
- Presupuesto: se debe solicitar un presupuesto siempre y el trabajo solo se realizará una vez lo autorice el cliente.
- Placa distintiva: en todos los talleres deben tener visible la placa oficial del taller de reparación. En ella aparecerá su número de registro legal y el símbolo que indica la especialidad que tiene (electricidad, carrocería, mecánica o pintura).
- Precios: el taller debe tener visible el precio por hora de mano de obra.
- Hoja de reclamaciones: los talleres deben tener disponible al público hojas de reclamaciones.
- Deposito: El cliente está obligado a solicitar un resguardo de depósito en el momento que deja el vehículo en el taller de reparación.
- Recambios: Los talleres no pueden utilizar piezas de segunda mano, salvo que no existan nuevas o que el usuario quiera abaratar costes.
- Vehículo de sustitución: Si un coche está en el taller más de la cuenta, exige por escrito que te faciliten uno de sustitución. La ley marca un plazo de 15 días para suministrar un recambio de un vehículo fabricado en España, y de 30 para los modelos de importación.
- Garantía: Todos los talleres legales están obligados a ofrecer una garantía de tres meses o 2.000 km recorridos.
- Averías repetitivas: En el caso de que una avería se produzca de forma repetitivas, hay que pedir una copia de la orden de trabajo.
- Factura: es obligatoria, en ella debe figurar el coste de la mano de obra y el de las piezas, las horas de trabajo y la garantía. Además debe estar firmada y sellada.
Fuente:motor.elpais.com