Antes de que llegue el mal tiempo revisa el parabrisas y el limpiaparabrisas

Primavera y verano se caracterizan por ser estaciones con excelentes condiciones climáticas. Pero, es con la entrada del otoño y el comienzo del mal tiempo cuando esta acción debe ser minuciosa.

Hay que tener en cuenta

Los accidentes de tráfico incrementan su porcentaje cuando la lluvia hace su aparición, ya que influyen de forma notable en la visibilidad del conductor. Si tu coche no se encuentra en condiciones, las probabilidades de sufrir un percance de mayor o menor grado se incrementan.

Además de las medidas de seguridad a adoptar durante los desplazamientos en estas condiciones, como aumentar la distancia de seguridad con el automóvil que nos precede o la reducción de la velocidad, entre otros, conviene revisar y reparar, en caso necesario, parabrisas y limpiaparabrisas.

Un impacto en el parabrisas puede impedir el correcto funcionamiento de las escobillas, con el consiguiente mal arrastre del agua que cae. Con todo ello, las marcas de agua se sucederán. Además, una rotura puede desencadenar en cualquier momento en una grieta.

Los limpiaparabrisas dejan rastros, hacen ruido, o no realizan bien su función. Pese a que solemos hacer caso omiso a estas advertencias, es momento de plantearse no solo revisar las escobillas, sino también de cambiarlas.